jueves, agosto 24, 2006

Los Kuentos de Kokonino

Estamos en algún momento entre 1920 y 1930, en los Estudios del productor de cine cómico, Hal Roach, entre esos barracones, en esos escenarios, se puso un joven acróbata llamado Harold Lloyd sus primeras gafas, creando todo un icono del siglo XX; por allí también estaban Laurel y Hardy, seguramente, enfrascados en otra de sus absurdas luchas contra el mundo; Los niños de la Pandilla vivían sus aventuras más o menos infantiles, Charley Chase inventaba algunos de sus mejores gags y James Finlayson y el bueno de Edgard Kennedy intentaban, desesperadamente y sin éxito, calmar toda la ira que llevaban dentro.
Aquello parecía una alegre casa de locos...

Y el que parecía más alegre y más loco era uno que no actuaba. Simplemente tenía allí su despacho donde se dedicaba a inventar historias. Cuentos en cómic de un desierto en medio de un Texas de sueño, de un paraje llamado Kokonino Kounty siempre cambiante, de un gato que amaba a un ratón, de un ratón que odiaba al gato y lo demostraba a base de tirarle ladrillos en la cabeza, de un gato que recibía esos ladrillazos como una bella demostración de amor, y un perro policía que deseaba sospechosamente al gato y hacía lo posible por llevar al ratón a Chirona. El tipo del despacho era George Herriman y la extraña obra que dibujaba era Krazy Kat, claro.
Cuando le preguntaron por qué tenía su despacho en los estudios de Roach dijo: "No creo que haya un lugar donde Krazy pueda sentirse mejor que aquí, rodeado de payasos"

Tenía razón el autor, por supuesto, si seguimos el esquema que ya comenté hace dos artículos, Krazy, el gato o la gata Loka, es claramente un Augusto, despistado, ingenuo, incapaz de ver el mal en sus dos compañeros ("Son unos enkantos" opina siempre) Incapaz de comunicarse normalmente, pues habla una jerga incomprensible mezcla de spanglish, inglés culto, navajo y vaya usted a saber qué más... Siempre feliz, siempre confiado, ridículamente sensible (Llora porque se entera de que están explotando a los átomos) Krazy es un "duende", como decía su autor, pero también el niño que deberíamos llevar dentro.
Ignacio, el ratón, es el Carablanca, listo, dominante, aprovechado y astuto, se molesta en explicar a su manera, las cosas que Krazy no entiende, además, al contrario que el gato o gata, tiene sexo, pues tiene mujer e hijos (y esta es sólo otra más de las cosas que permanecen en el misterio en este cómic)
Kop, el perro policía, es el Ringmaster, el Maestro de Ceremonias, el Payaso Serio, el que termina la diversión, el pedante que siempre habla con sinónimos, la cara más aburrida de la Ley, es al que hay que intentar engañar y esquivar, el tipo bienintencionado del que no conocemos el fondo.
Cualquiera de las aventuras de Krazy Kat con sus continuas persecuciones para no encontrarse nunca, sus diálogos que no llevan a nada, sus repeticiones y sus gags podría ser una rutina típica de clown. El mismo Chaplin, de hecho, usó muchas veces los ladrillos como proyectiles, aunque no se los tomara nunca como declaraciones de amor.

Claro, se me olvida decir lo innovador que fue George Herriman, que sus rótulos cambiantes parecen más modernos que muchos diseñadores de hoy, que sin él los dibujantes del comic underground de los sesenta hubieran estado perdidos, igual que Bill Watterson el de Calvin y Hobbes, o el grandísimo Figueras... Pero eso ya lo ha dicho mucha gente que sabe más que yo y, al fin y al cabo, este es un blog para desenmascarar y homenajear a los payasos (y al humor, y a la risa y...).
De todas maneras, si me tiráis de la lengua, diré que cuando veo los dibujos de La Gata Loka, me acuerdo sin saber por qué de los personajes de Samuel Beckett, igual, el Godot que esperaban Vladimir y Stragón era tan sólo un ladrillazo en la cabeza.
Sí, puede que tenga sentido y todo.

10 comentarios:

Yordi (Y.) dijo...

En fin, he tardado todo un día sólo en poder subir las tres imagenes que acompañan al tostón de turno...
Espero que lo lea alguien porque si no va a ser bastante frustrante :O)

Los Burgomaestres dijo...

Esto lo han leído sus admiradores, que le felicitan, como de costumbre. Herrymann y Beckett ¡magnífica asociación de ideas! Por cierto, si no conoce esta web, pasará un rato estupendo visitándola:

http://www.coconino-classics.com/

Yordi (Y.) dijo...

Je, je a la decimotercera vez de intentar subir las imagenes pensaba: ¿Cómo se las apañarán los Burgos o Chespiro que suben tantas a la vez? (Uno es torpe, pero bueno al final ha quedado bastante bien)
Lo de Herriman y Beckett se me ocurrió viendo los fondos del Kondado de Kokonino, y sospechando que los dos genios disfrutaban bastante de las payasadas de los cómicos, lo cual creo que está en sus obras...
Gracias por la web, la conozco, y es una delicia, también gracias por la información sobre la obra de Fo, pondré a todo mi gabinete de investigación en su busca ;O)
Y Gracias como siempre por pasarse!

Yordi (Y.) dijo...

Parece ser que soy el más querido por las empresas de spam... :O(

Los Burgomaestres dijo...

oh, no, amigo choko, se borran por decenas, ¡qué, decenas! ¡centenas! y a propósito amigos de este blog

¿¿¿DESEAN HACERSE RICOS???...

j. dijo...

Vaya, hombre; qué cruz con el Spam. A mí también me ha visitado ese coco, y lo que es peor, no sé cómo deshacerme de ello.

El texto extupendo, kompañero. :)

(¿Puedo decir que Beckett me aburre? Pues eso. Pero Herriman no; tal vez por que con 2-3 páginas de Krazy por sesión uno va servido, satisfecho, y con ganas de más. Otro manejo del 'tempo'...)

Un saludo.

Yordi (Y.) dijo...

Pues a mí todo este rollo del spam me ha dado la idea para un nuevo artículo (próximamente en sus pantallas)
Sigo prefieriendo los mensajes de los amigos que no me intentan vender prozac por correo eso sí :O)

Ah! Y me apunto sin duda alguna al sistema piramidal de los burgos.
Y bienvenido otra vez javi... Igual tu opinión sobre Beckett se debe a que siempre lo han monopolizado los intelectuales y eso lo ha hecho muy aburrido...
Menos mal que en Herriman sí coincidimos ;O)

Gordito Relleno dijo...

¿Quiere usted hacerse rico fácilmente?

Pues haga un ingreso en mi cuenta y se lo diré por propia experiencia.

Anónimo dijo...

más fomme la wea el autor no tiene ni un brillo

Anónimo dijo...

más fomme la wea el autor no tiene ni un brillo